Baja maternal: lo que queremos hacer y lo que hacemos en realidad




¿Os ha pasado también ha vosotras que cuando se acercaba el momento pensabais en lo que haríais aprovechando la baja maternal? Cosas como: practicaré inglés, me pondré al día con algo que tenia pendiente de hace tiempo, leeré esos libros que tengo en la estantería desde ni se sabe cuando,... Y un montón de cosas más porque claro, a pesar de que los bebes lloran, por alguna extraña razón, siempre pensamos que nos dejarán hacer cosas.

Es más, en el último trimestre de embarazo, no solemos poder hacer nada pero claro, no pasa nada porque luego estaremos unos 3 meses y medio de baja (si la disfrutamos completa claro) así que ya podremos hacer todas esas cosas (muchas veces referentes al bebe).

Y llega el día, te pones de parto y tienes a tu bebé (ojalá fuese tan simple verdad) y llegas a casa con tu pequeño. ¿Y que pasa entonces?

Pues pasa que te das cuenta de que el bebé pide mamar cada 2-3h (o el biberón que para este caso es lo mismo) y cuándo acaba de mamar toca dormir pero claro, no iba a ser tan fácil. Hemos de ayudar al bebé a dormir y no siempre es fácil. Así que cuando el bebé comienza a llorar, comenzamos a descartar posibilidades: el pañal, la barriga, tiene más hambre,... Le damos vueltas por la casa para que se duerma, le cantamos y cualquier otro truco que podamos haber oído. 

En fin, que al final conseguimos que se duerma y este es nuestro momento, dejamos al bebé en la cuna y vamos a hacer lo que sea pero en cuanto el bebé toca la cuna, comienza a llorar de nuevo y nosotros, con toooda la paciencia del mundo (porque es lo que tiene ser padre/madre) volvemos a empezar el proceso.

Y al fin llega ese momento en que el pequeño de la casa se ha quedado dormido y no en tus brazos (ya da igual que no sea en su cuna) y su aprovechas para hacer cosas. ¿Leer, estudiar, tejer una mantita para el bebé,... ? Para nada, en ese momento miras a tu alrededor y te das cuenta de que la casa esta hecha un desastre y como somos así, recogemos la casa en lugar de hacer aquello que queremos.

Con un poco de suerte, te da tiempo a recoger lo más superficial (fregar los platos, barrer, limpiar un poco el polvo, preparar la comida) y eso con suerte, lo más probable es que no puedas hacerlo todo porque el bebé a vuelto a despertarse (claro, ya han pasado 2h desde que comió) y todo vuelve a empezar.

Cuando al final consigues que coincida que el bebé este dormido y no haya nada urgente que hacer, entonces estas tan agotada que lo último que te apetece es ponerte a hacer cualquier cosa.

Y llega el día, casi siempre sin darte cuenta, en que se acaba la baja y no has hecho ni una décima parte de lo que querías hacer (y esto siendo optimista).

Así que si aún estáis en el embarazo, oiréis esto mucho, pero aprovechad para hacer todo lo que podáis ahora porque cuando llegue el bebé, tardaréis en poder hacerlo. Eso sí, todo tiene sus compensaciones ;)





Comentarios